sábado, 3 de diciembre de 2011

Último desafío diez misterios 2011.

El veinte de mayo de este año comencé una andadura , que había encontrado en el blog “ Una vida de novela” donde se nos planteaba un interesante desafío, la lectura de diez novelas de misterio, desde el diez de mayo, hasta el diez de diciembre, yo me apunté enseguida, la novela de misterio es mi favorita, y he tratado, de plantear escritos de muchas épocas y de distintos autores, con géneros totalmente diferentes pero con un punto en común, ese misterio o asesinato, que nos lleva a enfrascarnos en una trama, y no nos deja hasta que en las últimas páginas logramos desenmascarar a quién nos a llevado de cabeza durante trescientas o más páginas.

Este es mi último desafío por este año, pues no se si en principio, Natalia y Maga que son las administradoras del blog que he citado, me han contado como “desafíante”, yo  por mi parte lo he hecho con mucho gusto, y lo he pasado tan bien, que creo que todos los años haré este tipo de desafíos u otros parecidos, pues me parecen muy interesantes. Lamento los posibles fallos que haya podido tener y espero que todas y cada una de las obras propuestas, hayan sido del agrado de la mayoría, solo decir que todas forman parte de mi biblioteca personal y de mis lecturas favoritas.
A si que no podía por menos, terminar este desafío que  con una novela, de “fantasmas” hablo de “Otra vuelta de tuerca” de Henry James.

Henry James nació en Nueva York, aunque muchas personas están en la creencia de que es un escritor inglés, el 15 de abril de 1843 y murió en Londres el 28 de febrero de 1916, es conocido por sus novelas y relatos basados en la técnica del punto de vista, que le permite un análisis psicólogico de los personajes desde su interior.
Como escritor está considerado como una de las grandes figuras de la literatura americana; (Aunque al final de su vida, se naturalizó inglés). El Sentimiento de ser estadounidense en Europa, es un tema recurrente en sus obras,  Frecuentemente sus relatos se basan en la yuxtaposición de personajes artísticos, corruptos y seductores, con otros, de matices, múltiples como sinceridad, naturalidad y franqueza.
Este contraste entre la inocencia y la experiencia corruptora se muestra en obras como Roderick Hudson o El Americano.
Su estilo, está marcado por oraciones largas, pasajes  muy descriptivos que posponen el verbo por un espacio mayor de lo normal, la prosa resultante es a veces tan barroca, que una amiga y discípula Edith Wharton, quien dicho sea de paso, lo admiraba mucho, admitió que había algunos pasajes en sus obras que eran incomprensibles.

Pero hablemos de la obra, que nos ocupa, la trama comienza cuando una institutriz acude al cuidado de dos niños, en una vetusta mansión victoriana. Lo que en principio parece un cometido agradable derivará en una situación de pesadilla. Los niños viven impactados por un pasado inmediato en el que la anterior institutriz, Miss Jessel y Peter Quint, criado y ayudante de cámara, mantenían una turbia relación. La novela continuamente nos presupone ciertos abusos con los niños, y que tras la posterior muerte de Miss Jessel a dejado en ellos una huella imborrable. La novela se desarrolla en un ambiente de latente angustia.
La nueva institutriz, al tratar de ayudar a sus pupilos, comienza a percibir las apariciones de los fantasmas de la anterior preceptora, muerta como hemos dicho en extrañas circunstancias y del criado, que no sabemos a ciencia cierta si está muerto o solo se aparece para dar más “vuelta de tuerca a la historia”.

La novela, nos relata el impacto psicológico sobre la joven institutriz (de la que no sabemos el nombre en ningún momento del relato), soltera y reprimida sexualmente, se tropieza de repente con la historia de una aventura amorosa en curso, complicada por el hecho de que los amantes están muertos. La obsesión de la joven con el tío de los niños a los que ha de educar, así como la sugerencia de que los niños han estado expuestos  a algún tipo de conducta o abuso sexual por los amantes fallecidos, hacen dudar al lector de la veracidad de la interpretación, que la institutriz hade de los eventos; poniendo en duda hasta la propia veracidad de los fantasmas.

El aspecto que distingue a “Otra vuelta de Tuerca” y la convierte en la historia de fantasmas que marca un antes y un después en dicho género, es la posibilidad de una doble lectura, la forma ambivalente en que está ideada y escrita, puede ser interpretada  de, por lo menos, dos formas diferentes.
Llegados a este punto, los fantasmas ¿existen, se manifiestan, existen dentro o fuera de la cabeza de la institutriz, no existen?, La respuesta sería afirmativa y negativa a la vez. En cierto modo, la capacidad  interminable de “Otra vuelta de Tuerca”, hace posible interpretar, reinterpretar y acomodar todo de acuerdo a cada forma de ver.

“Hay tres cosas importantes en la vida: La primera, ser amable; la segunda, serlo siempre; y la tercera, nunca dejar de serlo.”
 Henry James

10 comentarios:

  1. No me gusta el misterio, bastantes tenemos cada día.

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  2. James fue un maestro de la novela psicológica -negra o policial, como se la prefiera- y sumerge al lector en fábulas donde los personajes vagan en la penumbra y la oscura contienda entre realidad e imaginación -propia de los personajes-. Hermoso proyecto lo de las diez novelas en un período determinado.
    Un abrazo.

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  3. ¿Sabes? Había leído "Una vuelta de tuerca" hacía muchos años cuando estudiaba inglés (lo había leído en ese idioma), y no me había gustado. Este año, decidí releer varios libros y éste fue uno de ellos (ya con 25 años más en mi haber), lo leí en español pues pensé que haberlo leído en inglés me había hecho perder de lo sustancial. Tampoco me gustó. Alguna vez voy a probar con otro de sus libros. Para mí el misterio es cómo este libro pasó a ser tan conocido.
    Un beso.
    HD

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  4. Me encantan los misterios, pero me voy más con Poriot y Holmes.
    Besos

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  5. Leí esta novela hace ya unos cuantos años y me encantó. Me gusta mucho el modo de narrar de Henry James. Y esa incertidumbre final. ¿Existen los fantasmas...?
    Y la película con Deborah Kerr es buenísima. Es una fiel adaptación del libro.
    Besotes!!!

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  6. No lo he leido, aunque me gusta mucho el misterio y segun tu reseña tiene buena pinta. Un beso.
    Silvia

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  7. Me gustan los libros de misterio, este no lo he leìdo, y por lo que contàs vos , me parece que no va a ser de mi gusto.- Hace mucho habìa una serie de libros naranja con novelas de autores varios, entre ellos Ellery Quent.-Con los años el gusto cambia...Besos Sabia, desde Bs.As. Renèe

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  8. Fíjate que conforme leía tu estupenda reseña me acordaba de la película de Amenabar esa no, la de los otros, ja, ja... y creo que existe algo de relación de situaciones que solo se producen en nuestras cabezas... Me gustan las tuercas... Bss

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  9. Me anoté en un sólo desafío este año y no lo cumplí jaja. No llego a leer los 50 libros, una pena, creí que podía, pero la rutina me dijo que era una ilusa ;)

    Otra vuelta de tuerca es un gran libro. Debe haber sido un pionero en el género del thriller psicológico, todo el tiempo nos hace partícipes haciéndonos preguntar si estamos del lado de la niñera o si creemos que está loca.
    Henry James es un gran escritor, tengo pendiente en mi biblioteca La copa dorada. Veremos si el 2012 me permite leerla.
    Besos.

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  10. Aunque el misterio no es lo mío, reconozco que veces me acerco y mucho a este estilo. Recientemente leí Aurora Boreal de Assa Larsson, y Pirámide de Henning Mankel.
    Y ahora leer la sinopsis tan detallada de esta novela, logra que de nuevo despierte dentro de mí el gusanillo del triller.
    Muchas gracias por el post.
    Un abrazo.

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